Entre el mes de julio de 1936 y el de abril de 1939 se disputó la Guerra
Civil Española, una guerra de hermanos contra hermanos y evidente preludio o campo de pruebas de la Segunda
Guerra Mundial. Para su inicio se realizó un golpe de estado prefabricado y encabezado luego por Francisco Franco Bahamonde, un joven general
que, por su apariencia y vocecilla melifluia y débil, parecía más un
pobre cura de pueblo que un máximo comandante de ejércitos. Tras la guerra aparecerá su hermano Nicolás, alguien más poderoso que él o en contacto con quienes dirigían a su hermano, pues le asesoraba y le daba las sentencias de
muerte y los decretos que tan solo debía firmar...
Francisco Franco no fue más que una figura bien escogida que recibía órdenes de más altos departamentos y de sus poderosos miembros.
El pueblo español, en general, no estimaba ni a los fachas ni a los rojos, ni a los de izquierdas ni a los de drerechas, los consideraba dos manos del mismo cuerpo. Un cuerpo con varios organismos y destructor de la convivencia, la cordura, el progreso humano y el honrado pan de cada día
Muchas personas huyeron, ni los unos ni los otros, decían |
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