miércoles, 15 de febrero de 2017

Textos de Nag Hammadi y fuerzas oscuras

En diciembre de 1945, unos pastores hallaron unos manuscritos gnósticos en Nag Hammadi (Alto Egipto), textos más importantes que los encontrados en las cercanías del Mar Muerto, dentro de las cuevas de Qumran. Los componen doce códices de papiro encuadernados en piel y los restos de un decimotercero, guardados con cuidado en una jarra de cerámica sellada y escondidos en las grutas próximas del macizo montañoso de Jabal al-Tarif. Los manuscritos ​fueron escritos en idioma copto (del judeocristianismo egipcio) entre los siglos III y IV de nuestra era, cuando sucedieron hechos trascendentales como la ejecución de los siete mártires de Tréveris y el inicio, por ello, de la espiritual Edad Media (ver Prisciliano de Ávila y Delirio en Tréveris en enlaces de abajo).
 
Las letras de estos códices tienen la particularidad de no haber sido retocados, manipulados u ocultados. Fueron traducidos y publicados tal cual (según fueron escritos en copto por sabias manos gnósticas del judeocristianismo primigenio) por un equipo de académicos dirigidos por James McConquey Robinson, de la Universidad de Graduados de Claremont (California). Los documentos demostraron que el cristianismo gnóstico no era el culto depravado descrito por los escritores del catolicismo ortodoxo, sino todo lo contrario.

Los textos gnósticos (gnóstico significa tener conocimiento o sabiduría) nos presentan evangelios como el de Tomás: hermano gemelo o mellizo de Jesús, con un Jesús muy sabio y semejante al Buda oriental, que induce a encontrar al Dios interno de cada cual, con el propio esfuerzo y el desarrollo de la conciencia personal.

Otro texto gnóstico: La Hipóstasis de los Arcontes (Gobernantes, en griego antiguo) relata la creación del mundo por los dioses y, después, la de los seres humanos a su imagen y semejanza. Es este el eslabón perdido, un eslabón encontrado en nuestra genética, manipulada por estos dioses para servirles de alimento, como comprobaremos más adelante. El texto coincide con el texto bíblico del Génesis, que cita la creación del universo y de la raza humana, así como con las leyendas mitológicas que citan la creación de los seres humanos modernos a partir de su relación sexual y mental con los dioses: ...

jueves, 2 de febrero de 2017

ONU: caja de cerillas que prende el mundo

La Organización de las Naciones Unidas es la mayor organización internacional que existe hoy y, en teoría, se creó para mantener la paz y la segurida internacionales, lograr la cooperación entre países y fomentar relaciones de paz entre las naciones. Fue fundada el 24 de octubre de 1945, con el mundo destruído por la Segunda Guerra Mundial, su sede está en la ciudad de Nueva York, en un terreno propiedad de la familia Rothschild y que esta cedió para la construcción del edificio donde se alberga su sede central. Este edificio tiene la forma de una caja de cerillas, con la medida del rectángulo dorado o áureo.

La ONU se caracteriza por tener una estrategia buenista o positivista para, teóricamente, salvar al mundo y a sus habitantes, sobre todo los empobrecidos y vejados. Para ello no ha dudado en utilizar a personas de gran valía humana y moral, como por ejemplo el Dalai Lama y Krishnamurti. Sin embargo, la ONU se creó para, literalmente, controlar a todos los estados del mundo y restarles poder y sobenanía. Dicho de otro modo, para llevarlos al son de los grandes poderes de este mundo y sus dirigentes o arcontes. Por ejemplo, las bases de la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia y la Cultura) fueron dictadas por Archival Macleish, miembro de la logia Skull&Bones (Calavera&Huesos) o Hermandad de la Muerte de la Universidad de Yale, y por el eugenista y primer presidente de la UNESCO Julian Huxley, hermano de Aldous Huxley, escritor de Un Mundo Feliz, novela que delata los conocimientos de ambos del programa para el mundo que vivimos el día de hoy...