martes, 1 de octubre de 2019

Para que no se aburra (o algo parecido)

No puedo evitar que venga siempre a mi memoria aquella historia mientras me aburro en algún momento baldío. Qué le voy a hacer. El hecho al que me refiero trata de una reunión familiar fuera de la foto de familia aparcada sobre el mueble de un salón, de descendientes del mismo árbol genealógico cuyo frondoso follaje se diversifica y retuerce tanto que impide reconocerse y esclarecer con precisión el tronco común del que parte. Si se me permite, la voy a contar sin dilación y con más detalles, para evitar que cualquiera se aburra como yo y ese tedio llegue a ser un problema que derive en pensamientos negativos, fantasías sin sentido o agobiadoras depresiones de mucha presión...