El presbítero suizo Ulrico
Zuinglio (1484-1531) tuvo un papel importante en el ideario protestante.
Conocía bien la versión latina del Nuevo Testamento realizada por Erasmo de
Rotterdam y puso empeño en transcribirla y memorizar sus comentarios. En sus sermones
criticó las enseñanzas y prácticas de la Iglesia , la veneración de santos o reliquias y la
venta de indulgencias, argumentos muy parecidos a los utilizados por Martín
Lutero en sus discursos. Pero Zuinglio atrajo multitudes por sus detenidas explicaciones
del Nuevo Testamento según lo estudiado en la Paráfrasis erasmista,
libro a libro y capítulo a capítulo. Los clérigos conocían bien la influencia
de estos Textos Sagrados, utilizados por los perfectos cátaros siglos atrás
para el bien y la paz de todos...
El papa Adriano VI (Adriano de Utrecht), tutor, consejero y
administrador de Carlos V, prohibió a Zuinglio predicar y pidió al Consejo de
Zurich que lo condenara por hereje. A comienzos de 1523, Ulrico se presentó
ante los consejeros suizos y expuso su rechazo al culto de imágenes, reliquias
y santos, al celibato, al sacramento de la eucaristía y a otros dogmas de la
Iglesia Católica. El Consejo de Zurich dio
la razón a Zuinglio y decidió independizar su cantón de la jurisdicción
católica a la que pertenecía: el obispado de Constanza. Ulrico Zuinglio se casó
en 1523 con Anna Reinhardt, viuda con la que ya convivía desde hacía tiempo, y,
pese al teórico disgusto de la poderosa Iglesia, Zurich se convirtió en un
señorío teocrático gobernado por él.
Ulrico Zuinglio, clérigo protestante de gran capacidad retórica |
El bávaro, filólogo, teólogo y clérigo predicador Johannes
Heussgen o Hauschein (1482-1531) colaboró con Erasmo de Rotterdam en las
traducciones del Antiguo y el Nuevo Testamento. Es conocido por su apellido en
griego, conjunción de las palabras casa y lámpara, en griego oikos y lampada,
cuyo resultado es Oecolampadio. Johannes
Oecolampadio quiso figurar de esta manera como representante de la Reforma en el cantón de
Basilea (norte de Suiza). En 1529 se realizó el Coloquio de Marburgo (principado
germano de Hesse), un debate teológico entre Lutero y Zuinglio.
Oecolampadio acompañaba a Zuinglio en representación del
protestantismo suizo y declararon que para ellos el sacramento católico de la Eucaristía sólo era
símbolo del cuerpo y la sangre de Cristo. Lutero negó esta afirmación y el
Coloquio de Marburgo rizó más el rizo de la Reforma , creando dos ramas más de confusión,
desunión y pensamiento protestantes.
El dominico alsaciano Martin
Bucer (1491-1551) estudió las obras de Erasmo de Rotterdam en la Universidad de
Heidelberg (suroeste de Alemania) y en esa ciudad conoció personalmente a
Martín Lutero. Poco después abandonó la Orden de Predicadores para casarse con una monja
que también había dejado su clausura y predicar el protestantismo en la ciudad
de Landshut (Baviera). Como era de esperar, el papado redactó en 1523 una
excomunión contra Martin Bucer que sólo supuso su traslado a Estrasburgo, ciudad
imperial cuyas leyes habían abrazado la Reforma protestante ese mismo año.
Bucer trabajó como intermediario político y mantuvo estrechos
contactos con el rey Enrique VIII de Inglaterra y los cabecillas reformadores
de distintos territorios centroeuropeos. Tras el fallecimiento de Ulrico
Zuinglio, se convirtió en dirigente de la política protestante en la región
suizo-germana y la extendió a otras zonas de Alemania. Para encauzar la Reforma en el arzobispado
de Colonia, preparó en la ciudad de Bonn varias ordenanzas con el también
reformador Philip Melanchthon. En 1549, después de ganar la batalla de Mühlberg
a los ejércitos luteranos, el emperador Carlos V dictó medidas a favor de la Iglesia Católica en territorios
protestantes y Martin Bucer abandonó Estrasburgo trasladándose a Cambridge
(Inglaterra).
Allí se alojó en casa de Francisco de Enzinas, humanista y
protestante adinerado de origen burgalés. Poco después de ser nombrado profesor
regio de teología de la Universidad
de Cambridge, Martin Bucer falleció y fue sepultado con honores en la iglesia
de esa universidad. En 1557, la irritable reina católica María I de Inglaterra,
hija de Enrique VIII y Catalina de Aragón, ordenó desenterrar su cuerpo,
quemarlo en la hoguera y destruir la tumba. Cuando Isabel I, hermanastra de
María, subió al trono inglés en 1558, la tumba de Martin Bucer fue rehecha sin
los restos de su protagonista... (sigue con los personajes importantes y protestantes de Germania y Suiza)
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